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  • ¿Qué tipo de ordenes te interesan más para operar en el mercado de valores?

    Al operar en el mercado de valores, existen diversas maneras de hacerlo. Seleccionar el tipo de orden adecuada es crucial, ya que contribuye a optimizar la gestión del riesgo. Tienes a tu disposición varias opciones que funcionan de diferentes maneras al momento de ejecutar órdenes de compra y venta de acciones. Por lo tanto, es recomendable que sepas reconocer el mejor momento para utilizar cada tipo de orden.

    Tipos de órdenes. ¿Cuáles interesan más?

    Cuando se invierte en el mercado de valores, hay diversas maneras de hacerlo. Escoger el tipo de orden correcta es crucial, ya que contribuye a mejorar la gestión del riesgo. Dispones de varias opciones que funcionan de forma diferente al ejecutar órdenes de compra y venta de acciones. Por lo tanto, es importante saber identificar el momento adecuado para utilizar cada tipo de orden.

    Tipos de órdenes

    Existen tres tipos básicos de órdenes que puedes realizar sobre las acciones:

    • Limitadas
    • De mercado
    • Por lo mejor

    Estos tipos de órdenes proporcionan flexibilidad a los inversores para realizar sus transacciones y permiten gestionar el riesgo de manera eficaz y sencilla. Por lo tanto, es fundamental saber cuándo utilizar cada una para aprovechar al máximo sus beneficios.

    Órdenes limitadas

    Una orden limitada establece el precio máximo al que estás dispuesto a comprar o el mínimo para vender. Con esta condición, la orden solo se ejecutará cuando el precio alcance un valor igual o inferior al que has indicado para comprar los títulos. En el caso de la venta, debe ser igual o superior. También tienes la opción de introducirlas tanto en el mercado abierto como durante un período de subasta.

    Es importante considerar que la orden se ejecuta total o parcialmente y al instante si se encuentra el precio que has especificado o uno mejor. Si no es así, permanecerá en espera. Esto se aplica también si el volumen de títulos no es suficiente para cumplir con tus indicaciones. Por ejemplo, si deseas adquirir 20 acciones de una empresa y solo hay 10 disponibles al precio que buscas, no se ejecutará nada o se comprarán las 10 disponibles, quedando a la espera de que se cumplan las condiciones para adquirir las restantes.

    La ventaja de las órdenes limitadas es que te permiten asegurar un precio si no tienes prisa por comprar o vender los títulos. Un caso de uso sería en el caso de una acción que no es muy líquida, es decir, sobre la que no se realizan muchas transacciones diarias.

    Órdenes de mercado

    En una orden de mercado, no especificas un límite de precio, sino que se negocia al mejor precio disponible al momento de introducir la orden. Así, tienes menos control que con las órdenes limitadas, ya que no estableces el costo que estás dispuesto a asumir. Además, si no se puede ejecutar la orden completamente al precio actual, continuará con los siguientes precios que se ofrezcan hasta completarse.

    Estas características hacen que las órdenes de mercado se ejecuten de inmediato, ya que no es posible que se realice de forma parcial. Para evitar esto, se dividen en partes. La consecuencia directa es que el costo puede aumentar de varias maneras. Una de ellas es que el precio de la acción suba a medida que se agotan los títulos más baratos.

    Asimismo, el costo de la transacción puede incrementarse debido a la naturaleza de las comisiones. Las ejecuciones parciales de la orden se formalizarán a través de varias operaciones si el precio varía en más de 0,5 €. Esto es más probable que ocurra en acciones poco líquidas, donde no se realizan suficientes transacciones, lo que limita la disponibilidad de títulos.

    Este tipo de orden te interesa cuando no te importa obtener un precio favorable, ya que quizás valoras conseguir los títulos en el menor tiempo posible.

    Por lo mejor

    En esta orden, no se indica un precio, ya que se negociará al mejor disponible en ese momento. Si no se puede cubrir el volumen que has indicado, la parte restante se limitará al último precio conseguido. De esta manera, no existe la posibilidad de que se busquen precios menos favorables.

    Es una orden que puedes utilizar cuando te interesa una ejecución inmediata o si deseas un control mínimo sobre el precio. Como no se ejecutará en varios precios, no se arrastrará hacia otros peores, asegurándote el más favorable en el momento. Esto se aplica tanto a la compra como a la venta de títulos.

    La elección de una orden u otra depende del nivel de control que busques, entre otros factores. Todas ellas te permiten lograr la máxima precisión, ya sea al buscar un precio específico o simplemente al querer entrar al mercado rápidamente. Para ampliar tus conocimientos, en Caja Rural del Sur te ofrecemos aún más recursos. Accede a la guía "Gestiona tu cartera" y ¡sigue aprendiendo!